SELENIO
Es un oligoelemento esencial. En 1073 fue descubierta la glutación-peroxidasa, una selenio enzima y principal forma activa del selenio en los tejidos. Está dentro del grupo de los minerales que se precisan en cantidades inferiores a 1 mg. diario. El organismo contiene 0,013 g. Está dotado de las mismas propiedades desintoxicantes que el azufre, en la forma de sulfuro de selenio
Los niveles en los tejidos están influenciados por la ingesta dietética y por el medio ambiente geoquímico. El selenio está distribuido en el suelo de forma desigual; así, encontraremos bajos niveles en Europa, EE.UU., Finlandia, China, Australia o Nueva Zelanda y altos niveles en Japón, Tailandia y Filipinas.
El selenio es un mineral presente en el organismo en pequeñísimas cantidades.
.- Función:
Tiene propiedades desintoxicantes y participa en el funcionamiento de una enzima: la glutation peroxidasa que destruye a su vez los radicales libres, efecto que potencia los de la vitamina E, considerado antienvejecimiento. . Es un potente antidepresivo y antioxidante (evita la oxidación de los ácidos grasos poliinsaturados en las membranas celulares) por lo que ayuda a prevenir el envejecimiento de los tejidos. Por el mismo motivo, se le asocia a la prevención de ciertos tipos de cáncer. Protege de enfermedades cardiovasculares y estimula el sistema inmunológico.
Sus propiedades anti-radicales libres es utilizada en los tratamientos anti envejecimiento, además retrasa los procesos de la miopía, puede evitar la aparición de cataratas, protege nuestro sistema cardiovascular y preserva la tonicidad de la piel. Junto con la vitamina E es un anti-oxidante y contribuye a las defensas del organismo contra los efectos de la vejez. Mejora la elasticidad de los tejidos y garantiza el buen funcionamiento de los músculos.
Ayuda a tratar los sofocos y el malestar de la menopausia.
Previene y trata la caspa, las dermatosis seborreicas y las micosis reincidentes
Favorece la formación de anticuerpos.
Es antídoto de metales como el cadmio, el oro, la plata, el mercurio y el arsénico.
Actúa como antiinflamatorio.
.- Fuentes alimentarias:
Se encuentra en los cereales completos, la levadura de cerveza en el germen y en el salvado de trigo, en las cebollas, en el ajo, en el tomate, en el brécol y las carnes, las setas, el salmón, las verduras, nabo, acelga, perejil, rábano, zanhoria, raíz de jengibre, limón, naranja, huevos y los mariscos. La Cantidad Diaria Recomendada (C.D.R.) es de 55-70 microgramos.
.- Deficiencia y/o toxicidad. El déficit puede provocar:
Falta de elasticidad, dolores musculares, distrofia muscular y envejecimiento prematuro.
Alteraciones cardiovasculares, hipertensión arterial y angina de pecho.
Baja resistencia a las infecciones, anemia.
Problemas articulares.
Causas que favorecen la deficiencia:
Tabaco y alcohol.
Radioactividad.
Consumo frecuente de alimentos ahumados o rancios.
Consumo de alimentos ricos en metales pesados.
Utilización de amalgamas dentales de mercurio.
La toxicidad está directamente relacionada con la procedencia del mineral. En forma orgánica procede de alimentos naturales y, salvo excepciones, presenta bajos niveles de toxicidad.
Es muy importante, si se toma como suplemento de la alimentación, conocer su procedencia y el control de un profesional médico, pues la toxicidad debida a la ingestión de altas dosis de éste en forma inorgánica puede causar graves problemas. Los síntomas más característicos son pérdida de cabello y uñas, alteraciones en la piel, malestar generalizado, náuseas, vómitos, alteraciones del sistema nervioso, etc.